
Hablemos para comprendernos.
Charlemos nueva vez para encontrarle rabo al burro.
Simulemos un confesionario.
Podría empezar con decirte que ya no me enamoro como antes.
Ya no espero visitas y rara vez espero tu llamada.
Hoy comprendo que la felicidad soy yo misma,
Aunque a veces no este convencida de mi teoría.
Te cuento que puedo mirar fijamente el abanico de mi techo, y no aburrirme,
No pensar en ti, no pensar en mí, no pensar en el mundo.
Te puedo confesar que aunque te extraño, no me haces falta.
No te busco en los lugares que ya visitamos,
No te escucho en mis canciones favoritas.
Charlemos para conocernos.
Pues, evolucionamos con el día a dia.
Ayer te conocía mejor que hoy y hoy te conozco menos que ayer.
Puede que te suceda lo mismo, me he convertido en camaleón con alas.
No se si me entiendes?
Te confieso que aun te quiero, pero con una pizca de egoísmo.
Porque me quiero más que a ti.
No te ofendas,
Pero es que también me he vuelto un tanto sincera,
Conmigo misma.
Voy aprendiendo a enfocar mis momentos de alegría,
En detalles insignificantes a la vista,
He aprendido que me aportas contentura y me siento calida y cómoda cuando estoy contigo,
Pero me amo.
Hablemos por un buen rato.
Quizás comprendamos que el espacio es lo que realmente importa.
Que la individualidad nos hará enamorarnos,
el uno del otro, el uno mismo.
Charlemos y busquemos nuestras diferencias,
no me interesa que seamos iguales.
24-Sept-07
11:06pm